top of page

Un lugar para la lectura...

  • Foto del escritorMaría Soledad Perugini

ENRIQUECIMIENTO LÍCITO

Escuchar, comprender, respetar, reflexionar… verbos que suelen ser conjugados, evocados, pronunciados casi a diario, sin embargo cuán costoso resulta muchas veces ponerlos en práctica.




Transitamos por la vida, formamos parte de una sociedad, de una institución, de una familia, ante las cuales permanecemos en ocasiones indiferentes, sin compromiso, apáticos. Simplemente pasamos, pero nuestro paso no transforma, no “deja huellas”.

Si somos capaces de considerar que el OTRO es otro yo, y que como tal merece SER VALORADO, ESCUCHADO y COMPRENDIDO, cuánto contribuiríamos a dignificar la vida humana.

Si pensamos en el Bien común, estaremos enriqueciéndonos.

Si evitamos que lo privado se haga público, estamos dignificándolo.

Si las correcciones que debemos hacerle al otro, son fraternales, es decir de hermano a hermano, cuánto dolor le evitaríamos, porque la caridad es la que siempre debe movilizar nuestros actos.

Si supiésemos escucharlo, nos daríamos cuenta de cuánto nos podríamos enriquecer.

Si queremos servir al otro, no debemos cuidar las apariencias, debemos ser auténticos, porque si no nuestra entrega no será sincera, sólo será fruto de un mero “lo hago para sentirme bien”. El verdadero donarse es el acto en el que uno es capaz de desprenderse de sí mismo para darse completamente.

La tarea que debemos asumir cada uno desde el ámbito que nos compete es la de promover el desarrollo integral del ser humano: este es nuestro compromiso como hombres de bien. Entonces, podremos encontrar nuestra propia plenitud en la entrega a los demás.


-De mi autoría - Publicado en el Anuario de la Revista del Colegio San José

23 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page